Teatro periodístico

El teatro periodístico el cual se nos mostró en clase el pasado Miércoles fue una herramienta esencial que como futuros educadores sociales seguro que la emplearemos como método de relación, emancipación  y conocimiento del grupo en el cual estemos interviniendo.

Las actividades prácticas propuestas han sido, sin lugar a duda mágicas e interesantes. 

Con dinámicas grupales, tales como: Continuidad del ritmo, expresión a través de las vocales, tip-tapata, el baile de los músculos, la representación de la máquina en movimiento y por último la relajación del árbol y la hormiga.

Todas estas dinámicas de contacto, han hecho posible la relación entre los compañeros, el aprendizaje y la diversión.

Hemos sido capaces de soltarnos y hacer de la clase un lugar comunitario de participación y juego. Donde los protagonistas éramos nosotros mismos. 

La interacción y el buen ambiente hicieron que nuestros músculos soltaran toda la tensión y participáramos creando una comunidad emancipada donde por medio del teatro periodístico y las dinámicas de contacto previas diéramos de manera conjunta un paso hacia la información periodística, en algunos casos distorsionada.

El teatro periodístico, consiste en la interpretación de una noticia de manera diferente, con el objetivo fundamental de que a través del arte, que emana la puesta en marcha del teatro, el público y los propios actores reflexionan y cuestionan la estructura de poder. De alguna manera el teatro periodístico nos permite desmitificar esos criterios de: verdad, objetividad y relatividad, que tienen los mensajes emitidos en los medios de comunicación tales como prensa, radio, televisión…

El teatro periodístico y el teatro del oprimido, tienen una vinculación mágica puesto que ambos pretenden que el individuo se reconozca como un sujeto de cambio de transformación. Poniendo a la persona como agente y paciente del cambio. Fomentando la interacción y haciendo posible la participación que hace que las personas no solo sean pacientes, sino también agentes de su propio cambio y posteriormente del cambio social.